Unas 2,327 fichas de inscripción de víctimas individuales y 199 fichas de comunidades y centros poblados, que deberán ser integradas al Registro Único de Víctimas (RUV), entregó Julián Berrocal Flores, representante del Centro de investigación Social Ayacucho (CEISA), a Jairo Rivas Belloso, secretario técnico del Consejo de Reparaciones (CR), al concluir la primera etapa del registro rural realizado en la provincia de Huanta entre setiembre y diciembre del año pasado.
El registro rural recogió información de personas y comunidades que fueron afectadas por el proceso de violencia de los años 1980 al 2000 en los distritos de Huanta, Luricocha, Iguaín, Huamanguilla y Santillana (Ayacucho); así mismo los registradores visitaron 6,275 viviendas con el objetivo de identificar a las víctimas y las afectaciones sufridas.
Esta experiencia dio cuenta de que las víctimas de los centros poblados rurales se han desplazado a los asentamientos humanos y barrios de las zonas urbanas de las capitales distritales, por lo que también se incluyeron acciones de registro en el distrito de Carmen Alto (Huamanga) donde se concentra un número significativo de potenciales víctimas y familiares procedentes de la zona rural de Santillana.
El representante de CEISA también entregó esta información digitalizada en una base de datos, cassettes y documentos auxiliares provistos por el CR para su integración al RUV.
Lima, 4 de febrero de 2009
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